viernes, 24 de enero de 2014

Mutantes y orgullosos

Les voy a pedir disculpas pero necesitaba hacer esta entrada. No se asusten pero... *hace una pausa dramática y la enfocan en primer plano* tengo que confesar que cada puta vez que veo las películas de X-Men me obsesiono y QUIERO SER UN MUTANTE. Listo, lo dije. Antes de todo esto, quiero aclarar que todas las cosas que escribí recién fueron exageradas, entendiendo que captan el sarcasmo y saben que no estoy tan trastornadita... Todo esto son los efectos post-visualización de todas las películas de X-Men, sin contar que estos días estoy durmiendo menos de cinco horas y me afecta mucho en la cabecita JEJEJEJE!!1 Ah, no.

Imagínenme en la cocina mirando un vaso de agua y tratando de congelarla con la mente o mirando fijo a la persona que me gusta con una cara súper creepy para tratar de leer sus pensamientos y saber qué piensa de mí. No puedo bajar la temperatura de los líquidos y no soy telépata, podemos tachar esas dos mutaciones pero nos quedan muchas muchas más, lo cual es excelente *se refriega las manos al estilo del Sr. Burns*. Bueno, no puedo prender fuego una casa así que no sirvo para controlar el fuego tampoco. No soy azul y no puedo cambiar mi forma física a la de Megan Fox ni Obama. Ni tampoco puedo traspasar las paredes, porque cada vez que lo intento me rompo la nariz. ¿Saben qué? Soy una pelotuda *sonríe como pelotuda y se acurruca abajo de su cama para esconder su vergüenza*

Me acuerdo que cuando era chiquita me gustaba jugar con mi hermana a que éramos personajes de X-Men *sí, también jugábamos a ser Barbies, Tortugas Ninjas, personajes de Street Fighter, Scooby-Doo y más* y yo siempre era Jean Grey, obviamente porque mis curvas son como las de ella... Bueno no, era porque de chiquita Scott y Wolverine eran mis platónicos, así que quería ser Jean *todavía quiero ser ella pero bueno chau* La cosa es que no soy mutante y no quiero vivir en este mundo. Necesitamos mutantes, necesitamos un Profesor Xavier, un mundo lleno de X-Men... *sale al patio, el cielo se nubla y empieza a tronar* ¡QUIERO SER UN X-MEN! *se tira al pasto, con los brazos abiertos mirando hacia el cielo y le cae un hipopótamo en la cabeza*

Llegando a una conclusión, si tuviera que elegir una mutación sería la de Mystique, que puede tomar la forma de cualquier persona. Lo cual sería genial, porque podría hacer bromas a todo el mundo y también conseguir cosas. Tipo, imagínense ser como Mystique y poder cambiar tu aspecto al de cualquier persona. Yo creo que tomaría la forma de Johnny Depp y lo iría a visitar, diciéndole que soy su "otro yo" del futuro y que vengo a advertirle algo para que su vida no sea miserable. Le diría "andá a Argentina y buscá a Florencia Mayer, casate con ella y tu vida va a ser de lo más perfecta", y ahí tienen, vuelvo a mi forma natural, me caso con Johnny Depp y todos felices.

Esta entrada es como un "plus" de la semana, por eso es media cualquiera, pero es algo, ¿no? Mil gracias por leer, sentite libre de comentar lo que quieras y hablarme por cualquier lado (acá al costado tenés todos los lugares en los que me podés encontrar). Cualquiera que me siga va a ser apreciado totalmente y va a recibir una canasta llena de flores al día siguiente. En fin, nos leemos en unos días.

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