Everything's coming up

¿Nunca te preguntaste cómo serían las cosas si hubieses hecho lo que querías hacer en lugar de posponerlo? Yo lo hago siempre. Son el tipo de cosas que te encontrás pensando a solas en la cocina a la madrugada, mientras estás esperando el agua que pusiste a calentar para el té de las 3 a.m.

Pensás en todo lo que no hiciste, todo lo que deberías haber hecho... y lo que no. Pensás en cómo las cosas hubieran sido, qué tan diferente hubiese sido tu vida. Esperando a que llegue el día, el día en el que eventualmente vas a hacer lo que siempre quisiste. Y con suerte, eso te va a traer buenos resultados, a veces incluso mucho mejor de lo que esperabas.

Ese día vas a sentir una sensación de alivio, como si algo que te estaba apretando los hombros te hubiese soltado y se hubiera ido lejos, muy lejos. Empezás a ser plenamente libre. Encontrás tu vocación, tu propósito en la vida, una razón para mantenerte vivo. Lo empezás a compartir con los demás, los cuales son merecedores de poder apreciar tal expresión de libertad. Se te ve sonreír más. Se te ve un brillo en los ojos que nunca antes se te había notado, porque esta vez, en lugar de tener algo escondido, te animaste e hiciste algo para mostrarlo.

Un día mucho más lejano a este, vas a mirar atrás, al pasado. Vas a recordar todos esos momentos en los que te diste cuenta por qué vale la pena estar vivo y poder apreciarlo, porque no muchos lo hacen. Hay que aprender a apreciar cada vez que tu mamá te mira a los ojos con orgullo y sonríe sabiendo que ella es una de las principales razones por las cuales vos estás acá firmemente parado, sonríe sabiendo que tenés un corazón vivo y unos ojos llenos de curiosidad por vivir, unos ojos que buscan descubrir todo lo que sea posible para poder admirarlo de la manera en la que debe ser admirado. Hay que apreciar cada vez que alguien te abraza o te dice lo mucho que significás para él. Cada vez que te reís tanto que te descostillás o te duelen las mejillas. Cada vez que podés escuchar el silencio y sentir la calma y seguridad que transmite. Cada vez que tenés un momento para pausar la vida y mirar a tu alrededor, admirando lo perfecto que es todo incluso aún con lo imperfecto que es.  Todos esos momentos son puros. Aprecialos.

En fin, esta entrada es un poco corta, pero siento que quise decir algo así hace mucho y no sabía cómo. Hace poco empecé a compartir una de las cosas que más me gusta hacer en la vida y estoy recibiendo un montón de reacciones y comentarios positivos. Así que quiero aprovechar para agradecer eso públicamente, incluso si esto no lo lee nadie o lo leen dos personas, sirve porque esas dos personas que lo lean quizás me entiendan, y quizás este breve texto influya en algún aspecto de sus vidas. Así que gracias por leer, les deseo todo lo mejor y los espero acá de nuevo en poco tiempo.

Asesinato en la sala del dentista

Miren que se puede tener mala suerte pero lo que fue mi día de hoy me hace pensar que en realidad soy protagonista de un reality show al mismísimo estilo de The Truman Show (película en la cual el personaje principal se encuentra viviendo dentro de un reality sin saberlo, es decir, toda su vida es ficticia y guionada a excepción de él mismo). Es que otra explicación no hay, hasta casi pude escuchar las risas grabadas típicas de una sitcom. Pero bueno, empiezo...

Primero que nada, hoy tenía turno para el dentista a eso de las nueve y media de la mañana. Era la primera vez que me pedía un turno tan temprano pero dije "me voy a levantar dos horas antes y voy a estar allá antes de las nueve así me atiende primera. Me levanté un poco tarde, tipo ocho y pico. Desayuné y me vestí casi a ciegas, me maquillé así nomás y como me sentía con ganas, le pedí prestados unos borcegos a mi hermana. Quiero aclarar, para que tengan en cuenta, que mi hermana no es de prestarme sus zapatos muy seguido, pero el día de hoy aceptó más que inmediatamente, así que agradecí y me los puse. Agarré mis cosas, me acordé de que no me había puesto perfume y fui casi corriendo a la pieza ¿PARA QUÉ? Cuando me di cuenta ya era tarde: uno de mis perros había hecho sus necesidades, por decirlo de una "linda" forma, EN LA PUERTA DE MI PIEZA. Así que adivinen quién terminó con caca en el zapato... Ahora, mi hermana ama esos borcegos, así que me olvidé del perfume y fui rápido al baño a limpiarlo hasta que quedó presentable. Me apuré otra vez y fui al auto. Nos fuimos al dentista.

Llegamos antes de las nueve y ya había tres o cuatro personas que estaban sentados en la sala del dentista. "Ah no," dije, "de acá me voy como a las cinco de la tarde" y me senté rendida. Mamá me alcanzó una revista cuya nota principal era sobre el impacto de los youtubers en la sociedad. Casualmente ese es un tema que estoy pensando mucho últimamente y cada vez estoy más decidida a cumplir mi casi sueño frustrado de ser vlogger/youtuber.

Cuando estaba terminando de leer la nota, llega una nueva señora y no tardó más de cinco minutos en ponerse hablar con otra de las señoras que ya estaba esperando. Ahora, no me malinterpreten, adoro a la gente grande, pero detesto a los que hablan como cotorras y encima en un tono de voz demasiado alto. A todo esto, hablaban de todos los tópicos posibles: platos voladores, la juventud de ahora, política, viajes, familiares, gente del barrio, todo. Una de las señoras se puso hablar de lo experta que era en drogas: habló de la marihuana como si fuera un químico. Esto se estaba convirtiendo en un chat-show titulado Hablemos sin saber. Llegó una señora más: la más agria de todas. Le contestaba mal a todos y los miraba con cara de asco pero les seguía hablando. Las frases que más decía eran "no, vos no sabés nada", "yo sé todo", "yo tengo razón" y "dejá vos no entendés nada".

Se hicieron las doce del mediodía y al fin la próxima en atender era yo. Llegó una señora más y le di el asiento, "total ya entraba". Me quedé apoyada contra la pared y con el celular en la mano. Tosí. "Nena, si tenés tos no podés entrar vos", escuché y levanté la mirada; era la señora agreta de antes. "Jaja" me reí y seguí con el celular. Esta señora me estaba despertando un instinto asesino y cada vez estaba más cerca de convertirme en Norman Bates. Pero finalmente me llamó el dentista y entré.

Cuando salí, me fui a casa y aproveché a dormir una siestita. Me desperté a las cuatro horas y todo marchó normal hasta después de la cena. Agarré la notebook, me hice una taza de sopa y me fui al comedor. En eso, me inclino y VUELCO LA TAZA DE SOPA SOBRE LA COMPUTADORA. Creo que esa escena resume mi día de hoy. Es mucha suerte que no haya terminado cometiendo algún homicidio o algo.

En fin, esta entrada es una de esas que quizás no son tan interesantes porque cuentan detalles de la vida de "alguien más" pero bueno, espero que les gusten mis anécdotas y se rían un poco al menos. Les prometo que tengo ideas mucho más divertidas para hacer en video porque sí, ya me decidí y en estas semanas voy a estar subiendo videos a mi propio canal de youtube. Les voy a ir avisando y espero que les gusten. ¡Hasta la próxima! Duerman bien, descansen y tengan un lindo fin de semana.

Just do it

Hola a todos de nuevo. La semana pasada quise tomarme otro día para escribir una segunda entrada pero estuve con un par de problemitas y no encontré el tiempo, así que he aquí mi breve y sincera disculpa, esperemos que esta semana pueda escribir más de una vez. Para resumir, estos días estoy pensando en todas las cosas que siempre quise hacer pero algún factor me impidió llevarlas a cabo. No sé ustedes, pero yo soy de esas personas que necesitan un pequeño empujón para hacer las cosas que quieren hacer. Hace unas semanas me propuse volver a escribir en el blog y lo hice, así que quiero creer que eso es un avance.

Quiero que ustedes hagan lo mismo. Piensen todas esas cosas que nunca hicieron por "X" motivo, piensen algo que les gustaría cambiar en sus vidas, algo que les gustaría agregar o algo que les gustaría sacar, ya sea una persona o una actitud. Si siempre quisiste el pelo corto, ¿por qué seguís teniéndolo largo? Si siempre te gustó bailar, ¿por qué no estás bailando? Si cierta persona saca lo peor de vos y te hace sentir mal, ¿para qué seguir teniéndola en tu vida? Y si siempre quisiste ser libre, ¿por qué no lo sos? Podés serlo cuando quieras, lo único que tiene que cambiar es tu actitud: si vos creés que no sos libre, nunca lo vas a ser a menos que te convenzas a vos mismo de que realmente lo sos, porque en realidad lo sos, sólo que a veces te cegás o no te das cuenta.

No te tires abajo. Cualquier cosa que quieras hacer la podés hacer tranquilamente. Muchas te van a tomar trabajo, otras no tanto, pero el esfuerzo da frutos, y el resultado se disfruta. Si es necesario, hacé una lista de todas las cosas que querés hacer este año, aprovechá que recién empieza y ponete las pilas. Tu vida va a cambiar un montón. Ya sea desde algo tan simple como visitar ese museo al que siempre quisiste ir, ir a esa cafetería que siempre te llamó la atención o leer ese libro que siempre deseaste leer. A fin de año agarrá esa lista, admirá todas las cosas que hayas tachado y pensá que todo eso lo hiciste vos y sólo vos.

No es tan fácil como suena, pero si te lo proponés podés hacer un montón de cosas. Sos joven. Tenés muchísimas cosas para experimentar; mil abrazos que dar; unas cuantas fotos que tomar; cien variedades de té que todavía no probaste; muchas sonrisas por conocer; mil chistes que te van a hacer reír; una montaña de canciones para escuchar, de las cuales muchas van a ser olvidadas pero muchas otras van a ser tus favoritas por un plazo indefinido de tiempo; tenés toneladas de películas para ver desde el sillón; unos cuantos libros que te van a cambiar la forma de ver la vida; cien mil cuadros e imágenes que contemplar; y millones de momentos que compartir con millones de personas que van a ser importantes para vos en mil maneras diferentes.

En fin, espero que a ustedes les sirva leer estas cosas de la misma manera que a mí me ayuda escribirlas y compartirlas. Espero transmitirles algo y que puedan apreciar sus experiencias de la manera que se merecen ser apreciadas. Aprovechen cada momento que tienen en la vida porque no todos duran para siempre, y si en algún momento sienten algo especial, no lo dejen pasar, disfrutenlo al máximo y traten de recordarlo siempre. Ahora me despido hasta la próxima entrada, besos y abrazos!

Revealing Batman's true identity

Buenas noches, hoy me puse a pensar en la frase "give a man a mask and he'll become his true self" y en cuán acertada está, así que voy a hablar de eso en esta breve entrada. Para los que no cachan mucho el inglés, la traducción sería algo así: dale una máscara a un hombre y se convertirá en su verdadero yo. Si nos ponemos a pensar verdaderamente en el significado de la frase, sacaríamos la conclusión de que las personas a veces no somos nosotras mismas cuando nos encontramos frente a una exposición pública. A veces hay gente que para mostrarse como realmente es, "necesita" estar en pedo o drogado, maquillarse como una puerta o simplemente usar un gorro/flequillo o algo así para cubrirse un poco y sentirse más seguro, es decir, en términos más metafóricos, usar una máscara.

Piensen lo que harían si pudieran estar un día entero disfrazados y salir a la calle así. Lo que podrían hacer para pasarla bien y divertirse sin tener que preocuparse por las críticas y los prejuicios. ¿Qué harían? Yo probablemente saldría a hablarle a todos, a sacarme fotos y a grabar videos graciosos, que es lo que quise hacer todos estos años mientras que en la vida real trato de evitar cada situación social porque me hacen sentir ansiosa o incómoda, porque no me animaría a hablarle a nadie, razón por la cual me pierdo de conocer a muchas personas que seguramente son geniales y se merecerían mi atención. No sé, me da "vergüenza" o "cosita" porque siento que voy a ser juzgada o que voy a caer mal, pero bueno *aparece disfrazada como batman y sale corriendo a la calle*

Podríamos hacer un experimento y llamarlo "the superhero challenge" y hacer que cada uno salga a la calle disfrazado como su superhéroe favorito y haga lo que se le plazca *salían a sacrificar animales y personas* No mentira, no lo hagan, pero simplemente piensen lo que les gustaría hacer si tuvieran la certeza de que nadie los va a juzgar, esas cosas como cruzarse con alguien que tiene una remera de The Beatles y querer hablarle pero no terminar haciéndolo por miedo o timidez; o algo como dejar de esconderse atrás de una mesa en la esquinita oscura del canto-bar en vez de animarse a divertirse y hacer el ridículo cantando un tema de los Backstreet Boys arriba de un escenario. Todas esas cosas son hermosas y les van a alegrar los días, muy pocas terminan "mal" porque lo peor que les puede pasar no es morirse ni quebrarse una pierna, repito, lo peor que les puede pasar es nada más y nada menos que pasar unos segunditos de vergüenza pero no es nada que no se pueda superar. Los malos recuerdos terminan de dos maneras, algunos se desvanecen y otros se convierten en anécdotas graciosas. Y todos esos recuerdos que sean lindos los van a seguir por años. Incluso cuando no haya ni una foto o video que les refrezque la memoria, esos momentos quedan en sus mentes para siempre y son buenas historias para contarle a algún extraño en algún tren.

Fijate lo que puedas sacar de esta entrada y pensalo, o si es necesario, hablalo con la almohada o con el peluche de Mickey que tenés en la mesita de luz. Tratá de ir mostrando tu verdadero "yo" a los demás, porque sos una persona única y los demás no tienen por qué perderse de conocerte. Aprendé a abrazar tus defectos y convertirlos en algo bueno, que no te afecten para nada y que no se conviertan en tu punto débil, en tu kryptonita, por así decirlo. Por más que haya mil personas en el mundo con tu mismo nombre, vos sos especial porque sos único, no hay nadie como vos. Todos los detalles y aspectos de tu personalidad son como huellas digitales, hay miles de características y miles de combinaciones en el mundo, pero la tuya es la tuya. Nunca vas a ser totalmente idéntico a otra persona, así que aprovechá lo especial que sos, descubrí qué es lo que te hace destacar y mostralo.

Bueno en fin, espero haberle dado sentido a esta entrada y que entiendan mi punto de vista, que coincidan o que no, pero que puedan sacar sus propias conclusiones de esto. Espero que les haya gustado por más que me haya puesto más seria que otras veces, pero este tema se lo merece. Gracias por leer mis coherencias y mis incoherencias. Voy a ver si esta semana puedo escribir una segunda entrada y en el mejor caso, quizás lo convierta en hábito y saque mínimo dos entradas por semana. El título me lo hizo poner Lois Lane para captar la atención de los lectores pero no le den bola. Hasta la próxima. That's all, folks! *muerde la zanahoria, guiña un ojo y se pone la pantalla en negro*

'F' is back: rise against pijamatitis

¿Hay mejor forma de volver a escribir que haciéndolo en pijama con un vaso de vino tinto en la mano? No, creo que no. Les habla Florci Mayer y el título de la entrada me hace sentir adentro de una serie como Pretty Little Liars (déjenme ser friki tranquila). Primero que nada, es medio raro volver a escribir en el blog después de tanto, ¿vieron cuando dicen "mañana me pongo a dieta" pero lo posponen por años hasta que llegan a una etapa de limbo y se encuentran mirando el techo sin hacer nada? Bueno, eso es lo que me pasó a mí en estos años. Sí, dije años. Increíblemente no escribo desde el 2014, cosa que me tendría que molestar más pero mi plan es escribir una vez por semana como mínimo, así que si alguna vez dejo de escribir por un mes, quiero que aparezcan, entren a mi casa a la fuerza, me aten a una silla y no me suelten hasta que no escriba una nueva entrada.

En esta entrada les voy a hablar dos segundos de un problema que me estuvo afectando todos los días desde que terminé el colegio: pijamatitis. Al no sentirme obligada a ponerme el uniforme o vestirme presentable para enfrentarme a otras personas es como que me chupa un huevo todo y me quedo en pijama todo el dia. Déjenme ponerlo así, y esto no se puede explicar de mejor manera que con esta pregunta: ¿vieron cuando se levantan, se pasan todo el día en pijama, se bañan y en vez de ponerse ropa decente se ponen OTRO pijama? Así se siente. Mi goal de este año sería cortar con este estado de "procrastinación" y empezar a hacer algo, incluso los días en los que no tenga nada para hacer. Así sea ponerme a escribir, a dibujar o salir de mi casa, quiero hacer lo que sea, tomar mi tiempo e invertirlo en algo productivo.

¿Qué fue de mi en estos meses que pasaron? Mi vida no cambió mucho: fui a recitales, conocí gente, me alejé de gente, me volví a juntar con gente de la que me había alejado, rendí el FCE, aprobé el FCE, me recibí de azafata, empecé a trabajar en una perfumería-pañalera en la cual mis jefes son mis viejos, aprendí a disfrutar un poco más la vida e hice un par de cosas que vale la pena nombrar, tales como saludar gente desde un puente, correr por Puerto Madero de noche, ir al Museo de Bellas Artes, ir a plazas de noche, volcarme un licuado en la ropa y reírme de eso, pintarme la cara como Bowie, comprar cd's a mitad de precio y quejarme de elecciones de actores para ciertas películas.

En fin, tengo miles de anécdotas para contar pero no quiero hablar sólo de mí, quiero dejarles algo para que piensen ustedes. Nos pasan muchas cosas y sentimos millones de cosas diferentes. Esa canción que te identifica de tal manera que pensás que la deben haber escrito sólo para que alguien como vos estuviera escuchándola en este mismo momento, esa canción seguramente toca alguna vida de la misma forma que toca la tuya. Tu película favorita probablemente es la película favorita de otra persona al otro lado del mundo, con la cual lo más probable es que no te cruces nunca en tu vida pero quién sabe si alguna vez no cruzarán alguna mirada en un tren sin saber todas las cosas que comparten incluso habiendo estado todos esos años en partes diferentes de la Tierra.

Todos los momentos en los que sentís que tener que decir que sí pero decís que no, todos esos momentos podrían haber sido una historia para contarles a tus nietos. Así que pensalo mejor la próxima y si tenés la oportunidad de dar el salto y decir que sí, hacelo. Te lo digo por experiencia, tomá el riesgo y hacé todas las cosas que querés hacer. No te quedes con las ganas. Sacá fotos, tomate el tiempo de escribir detalladamente ciertos momentos de tu vida, aferrate a recuerdos y disfrutalos.

Y ahora, me despido otra vez, pero les prometo que voy a volver a escribir y lo voy a hacer lo más seguido que pueda, y se los prometo con una mano en el corazón (en realidad tengo que tener las manos en el teclado pero pretendamos que tengo la mano derecha sobre mi pecho). Bueno, espero que les de gusto volver a leerme porque yo a ustedes los adoro. Hasta la próxima *les tira caramelos de la selva y besos*

El síndrome de las vacaciones

Primero que nada, ya sé que tengo que dejar de abandonar el blog, ponerme firme de una vez por todas y escribir semanalmente (mínimo). Ya lo voy a lograr pero mientras tanto voy a tener que seguir luchando contra la procrastination. Pero bueno, en esta entrada vamos a hablar de "el síndrome de las vacaciones" que nos afecta a muchísimas personas o al menos quiero creer que no soy la única a la que le pasa esto y soy una rarita.

Este síndrome (para llamarlo de alguna manera) consta en cambiar de personalidad durante las vacaciones o los viajes a algún lugar lejos de nuestras casas. Estos cambios pueden ser positivos y negativos. Yo, cuando estoy de vacaciones, suelo hacer cosas que en mi casa nunca hago a menos que sea necesario. Algunas de estas cosas son: levantarme temprano a CAMINAR o preparar el desayuno, no puedo quedarme NINGÚN día encerrada sin hacer nada (cosa que cuando estoy en mi casa hago muchísimo, pero MUCHÍSIMO), ordenar y/o limpiar cosas, leer un libro por día (mínimo), tomar cinco minutos de sol (lo cual es mucho, teniendo en cuenta que cuando estoy en mi casa no tengo contacto alguno con la luz solar, #fact) y no dormir siesta.

Ahora vamos a hablar de algunas cosas individualmente. Primero, ¿LEVANTARSE TEMPRANO? ¿Quién se levanta temprano un día libre por voluntad propia? Casi nadie, creo. Cuando estoy en mi casa y tengo un día libre, no me levanto a menos que mi vecino empiece a martillar la pared a siete manos (bueno, ni siquiera cuando pasa eso). Igualmente, hay que ser sinceros: cuando te levantás temprano y te organizás bien, la podés pasar súper bien y, obviamente, dadas las circunstancias, va a ser un día bien aprovechado. Tampoco hay que exagerar, tipo todos sabemos que levantarse a las 5 de la mañana para ver el amanecer y sacarle una foto es hermoso pero si no estás acostumbrado te aseguro que a eso de las 7 de la tarde vas a estar derrotado. El otro extremo que se basa en levantarse a las 7 de la tarde no es una muy buena forma de aprovechar los días. Así que no nos tenemos que dejar llevar por ninguno de los dos extremos.

Quedarse encerrado todo un día puede ayudar a la propia salud mental, seriamente. Te podés quedar todo un día mirando Sherlock, Doctor Who o lo que sea que quieras ver, pero no podés hacerlo por una semana a menos que lo necesites y te sobre tiempo (si lo hacen, igual los entiendo porque yo lo hice mil veces). Cuando estás de vacaciones es copado salir y aprovechar el nuevo ambiente en el que estás, pero ¿por qué no aprovechar y salir cuando estás en tu barrio también? Es lindo caminar y conocer tu propio barrio, eso sí, tené cuidado con la billetera porque últimamente no se puede caminar tranquilo sin preocuparse por tus bolsillos y tu seguridad. Cuando se te de la oportunidad, salí. Tratá de decirle que sí a todas las cosas que te van a hacer bien.

Ordenar y/o limpiar. Bueno, muy pocas veces me agarran ganas de ordenar y/o limpiar, pero cuando lo hago, dejo impecable todo lo que puedo. Igual, si no les gusta ordenar ni limpiar, no hay problema, abajo les voy a dejar un teléfono para que puedan contratar un elfo para que trabaje para ustedes. Aprovechen porque los elfos no son infinitos y cobran mucho, pero vale la pena.

Leer un libro por día es una exageración pero es lo mejor que se puede hacer cuando tenés tiempo libre. Te llena de cosas para pensar, te llena de sentimientos, de todo. Es inexplicable. Pero traten de ser sanos y leer un libro por semana como normalidad. Cuando estoy de vacaciones soy capaz de leerme un libro entero en una noche, y no paro hasta terminar la última línea de la última página, pero tengo que bajar un cambio porque 1) No tengo plata para comprar tantos libros físicos y 2) Si leo libros en el celular, a los 50 años me voy a quedar ciega (o quizá antes).

Tomar sol y no dormir siesta. Bueno, tomar sol no es algo necesario pero si sos más blanco que una hoja de papel (o sea, blanco nivel Florci, sí, aparezco en un nivel de blancura de tan pálida que soy) quizá te haría bien tomar un poco de sol, porque sino, cuando salgas en un día soleado, podés explotar, literalmente explotar (no, mentira, perdón, tengo que dejar de exagerar todo). Tomá cuanto sol te parezca pero no te zarpes porque vas a quedar roja como un tomate y no vas a poder tocar ni siquiera una pluma sin que te duela cada una de las moléculas de tu cuerpo. Y ¿no dormir siesta? Por favor, la siesta es una religión. El mejor consejo que les puedo dar es: DUERMAN SIESTA, QUERIDOS. Al menos veinte minutos por día, pero tómense un descanso de todo y duerman. Dormir es salud, dormir es vivir, dormir es más. Si dormir fuera una campaña política, sería del tipo que regala comida, internet, seguridad y felicidad eternamente, así que voten por dormir.

Esa fue la entrada de hoy, espero que les haya gustado, voy a seguir publicando (más seguido, lo prometo). Hasta la próxima, VOTEN POR DORMIR *pasa en una carroza y les tira lluvia de billetes*

No nos jodamos

Hablemos de las expectativas y la realidad; expectativas hay muchas pero realidad una sola (es triste, ya sé). Muchas veces esperamos hacer algo y que salga de determinada forma, pero nos sale todo de manera contraria. No siempre, pero mayormente las expectativas no se apegan mucho a la realidad y nos tenemos que acostumbrar a disfrutar de ésta última, porque sino vamos a vivir en una constante decepción, ¿no? Pero bueno, estén bien, que les chupe un huevo todo, no se preocupen por cosas que no tienen sentido y disfruten.

Seguro muchísimas veces les pasó que se encontraban solos en su dormitorio y pensaron "qué copado estaría salir con amigos a caminar a la noche" y se imaginaron una aventura nocturna con sus grupos de amigos, caminando por las calles del barrio, viajando de acá para allá sin saber dónde están, boludeando, sacando fotos, sentándose en la vereda a comer pochoclos (?) y al rato dijeron "Fuck it" (o "YOLO" en su defecto, que es más que un cliché pero bueno, se usa). Agarraron el teléfono para llamar a sus amigos y les pasó como a mí: no tienen amigos entonces se quedaron media hora mirando al teléfono (todo triste). O quizá salieron con dos o tres amigos, no supieron a dónde ir y les afanaron las billeteras a todos, estando dos cuadras de tu casa. Digamos la verdad; no podés salir con tranquilidad a la noche a menos que vivas en Puerto Madero o algún lugar así.

Otras de las expectativas que tenemos es que todo va a ser como en las películas/series/libros, y no, no todo va a ser así. Más que nada porque las películas, las series y los libros que nos hacen ilusionar están mayormente basados en ficción. Para las chicas a las que nos atraen un poco (bastante) los "bad boys" porque son "facheros" es común pensar que atrás de toda esa máscara de chico malo hay un pibe súper tierno y dulce, como en casi todas las películas de adolescentes (el chico malo se enamora de la chica buena y terminan felices para siempre). Pero no, quizá haya excepciones pero esos pibes son los que más te hacen sufrir, va a agarrar tu corazón y lo va a cortar en Juliana para después dárselo a una puta que vale tres pesos la hora. Así que chicas, "tierno" y "malo" en la vida real casi nunca van de la mano. La ficción no se inventó para crearnos expectativas, sino que fue creada para llamar nuestra atención, es por eso que siempre pensamos que la ficción es mejor, que queremos vivir con hobbits y todo eso, pero bueno, la experiencia más cercana que vamos a tener a eso va a ser en un sueño o en algún simulador en Disneyland (si alguna vez vamos), hay que aceptarlo.

La ficción es genial, hay que admitirlo, todos pero todos alguna vez quisimos vivir en un mundo sacado de una película o algún libro (Realidad 0 - Ficción 1). A pesar de todo esto, la realidad tiene sus cosas buenas; pensemos que en la realidad no existen muñecos asesinos que van a cobrar vida a la noche y te van a asesinar (Realidad 1 - Ficción 1). Ni tampoco vamos a jugar un juego de mesa que nos va a cambiar la vida y nos va a hacer ver la muerte de cerca (como Jumanji o Zathura), los juegos de mesa de la realidad son lo más simple del mundo (Realidad 2 - Ficción 1). Y admitámoslo, en la vida real nunca pero nunca nos va a pasar que una nena con el cabello hasta los tobillos va a salir de un pozo y nos va a cagar la vida, nunca, y eso para mí le da todos los puntos a la realidad (Realidad 9654878457 - Ficción 1). Agradezcamos que vivimos en una realidad en la que tenemos la posibilidad de inventar e imaginar cosas, podemos crear mil mundos y soñar mil cosas diferentes también. Ahora me voy a inyectar jugo Cepita de durazno vía intravenosa, así que me voy despidiendo, hasta la próxima, espero que les haya gustado. ¡Un abrazo y gomitas con formas de ositos para todos!