miércoles, 9 de mayo de 2012

La tecnología va avanzando y algunas cosas son reemplazadas..

Así es, tal y como lo dice el título, estamos en unas décadas en las cuales la tecnología, las comunicaciones y las innovaciones en estos ámbitos son la principal fuente de atracción, decime que nunca te pasó esto de comprarte un celular, que a los dos días salga uno nuevo, verlo y decir "la puta, quisiera tenerlo", en fin, quererlo. Para lo que nuestro nuevo celular nos parece excremento puro.

 Muchas cosas nuevas pero hay costumbre que no cambian.. ¿ejemplos? Hacerles creer a los chicos que la existencia de Papá Noel y del ratón Pérez son verdaderas.. Bueno, les cuento una duda existencial que me surgió, ¿qué pasaría si eso cambiara?

Es decir, piensen si ya no les hacemos creer en Papá Noel, sino que les leemos Los Cuentos de Beedle el Bardo y les hacemos creer que los magos existen (yo creo en los magos, creo, creo). Les haríamos creer que nosotros asistimos a Hogwarts y los convenceríamos de que somos magos verdaderos. Pobres pibes se creerían que son squibs y a los 14 años se pegarían un tiro.

Sería interesante ver cómo crece e interactua un chiquito con ese tipo de creencias. Seguramente seria un toque más decente que los nenes de ahora, son re pendejitos.

So, gobierno, tome en cuenta mi idea y veremos como la sociedad cambia con el correr del tiempo, todos unidos por un mundo mejor, ah que carajo.

martes, 8 de mayo de 2012

¿Quiere ser millonario? Compre un libro de cocina

¿La clave del éxito? Ne, eso no existe, es pura improvisación. ¿Quieren escuchar un relato que parece ser más o menos una historia sobre el éxito, la suerte y la fortuna? Okay, acá vamos, andate figurando e imaginando la historia en tu mente.

 Un día estás en tu casa, cumpliendo con la rutina de tiempo libre. Estás sentado en el sillón abajo de una lámpara leyendo un libro y de repente te viene una idea, "brillante", según vos. Te levantás dejando el libro abruptamente arriba del sofá y vas corriendo a la cocina. Empezás a preparar galletitas, normales, como siempre. Llega un momento en el que decidís empezar a intentar cosas nuevas, le metés y le metés ingredientes que no aparecían en la receta y zás, las metés al horno con la expectativa de que salga perfecto.

El tiempo hace su deber y al rato ya estás apagando el horno. Las sacás y las probás. Ese gustito adictivo, que te da ganas de comer más y más hasta que no queden rastros de ninguna galletita. Empezás a comer y te figurás que sos un groso. Las tratás de vender y probas suerte.

La cosa es que las galletitas son tan adictivas que hacen efecto en la gente y te haces millonario hasta salir entre las casas mas raras y costosas de Mtv. Esta historia es verdadera, una mujer se propuso hacer las galletitas mas adictivas y ahi tienen, ganó todo lo que tiene gracias a una improvisación.

Listo, ahora nos dedicamos todos a cocinar e intentar recetas nuevas y adictivas. En fin, escribir esta entrada hizo que me den ganas de comer galletitas de quaker.